about us
Ellos están ahí. Calladitos, esperando a que les veas. Es como una partida de escondite a la que no sabes que estás jugando. ¡Menuda paciencia tienen! Pasas miles de veces por delante y ellos aguantan la respiración, no mueven ni un pelo… hasta que un día, ¡zas!. Ahí está. Mirándote. Feliz de que por fin le hayas encontrado.
Y de repente, salen por todas partes. En los lugares más insospechados: enchufes, cajas, fachadas, mandos… descúbrelos y compártelos con nosotros. ¡Nos encanta hacer nuevos amigos!
Manda tus rostros aquí: hola@rostrosescondidos.com
About me
Uno de mis mejores amigos es una almohada. No sé cuándo empecé a relacionarme con los objetos, pero sí sé que no puedo evitarlo: si como espaguetis sé lo mareado que termina el tenedor, tengo que pararme a saludar a todo muñeco que pase cerca mío (les encanta, y a mí también), me cuesta comerme algo que me caiga simpático… no es que las cosas me hablen, es que me sonríen. Veo sus caritas y ya está: tengo amigos por todas partes. Estoy segura de que tú también.